No que no, si que si ya volvimos a salir... aunque esta vez muchísimo más desorganizados que nunca.
Este fin de semana fue la XXXI Marcha del Orgullo LGBT y obvio no pude faltar, no como prometi hace un año, debo aceptarlo, mi disfraz de femme fatal o de conductora de tracto-camión, me lo reservo pal otro año...
En fin, iba a dejar pasar el post de la marcha, pero no quise hacer lo mismo que todos los periódicos hicieron el día después. Sorprendente fue ver como en ningúno aparecía algo en sus primeras planas!!! Sé de sobra, que hay muchos otros temas que nos quitan el sueño, pero algunos de plano se pasaron la marcha por el arco del triunfo y ni una mencioncita les merecimos, y de los que se dignaron a dar la nota, como todos los años, dividieron la cifra real entre no se cuantos y pusieron que a la marcha, asistieron CASI 15 mil personas... 15 mil!!! Creo haber pasado la primaria y aprendido a contar y creo que para tener a Reforma atascada por donde la veas se necesitan muchisimos más que 15 mil personitas.
Tengo que decir tambien que este año dejo mucho que desear, no hubo reina gay, no sabias ni pa donde moverte, yo no supe cuando empezó, ni que contingente si salió a las 12, todo mundo estaba parado platicando como si nada en medio de la calle y justo pensé como después preguntó Sheba ¿Es esto una gran antro gay en medio de Reforma? Nonono, estuvo feo, feito y luego a mi que se me ocurrió salir a marchar medio cruda y con los amigos más dispersos del mundo, no lo hagaaan nunca, porfavor!!!
La versión XXXI de la marcha del Orgullo acabo con más contratiempos que nada y para acabar el cuadro como se debe, un aguacero con granizo y toda la cosa empezó a medio camino e hizo que muchos jalaran pa sus casitas atascando el metro (Igual y ahi fue donde contaron lo de los 15 mil asistentes) ya no hubo espectaculito en el Zocalo y como yo fui de las rajonas que tomaron el metro antes del aguacero ya no supe en que acabo todo.
Aybu!! Ahora sí todos haciendo fila para la limpia el próximo año antes de la marcha o ya de plano vamonos todos a bailar a Chalma, tan siquiera para compensar la bailada que no dimos en Reforma y en el Zócalo capitalino... ¿Que no?